Si no la habéis visto, ya estáis tardando.
La película de la que os vengo a hablar es de “El club de la
lucha” (Fight Club) y más de la peli en sí, de lo que hay detrás de esta.
Es una película estadounidense del año 1999 basada en la novela del mismo nombre que Chuck Palahniuk escribiría en un tiempo record de tres meses durante 1996. La película fue dirigida por el archiconocido directo David Fincher y las estrellas de Hollywood que darían vida a los personajes fueron Edward Norton , Brad Pitt y Helena Bonham Carter. Fincher pretende dotar de violencia a la película para servir como una metáfora del conflicto entre una generación de jóvenes y el sistema de valores de la publicidad. El director consiguió mantener al público incómodo durante el transcurso de toda la película y lo que es más importante, logra un final inesperado. Norton interpreta al protagonista sin nombre, un "hombre común", que está descontento con su trabajo de oficina. Casi sin que nos demos cuenta forma un "club de la lucha" con el fabricante de jabón de Tyler Durden (Brad Pitt), y se ve envuelto en una relación de amistad un tanto extraña con él y por otro lado aparece una mujer un tanto siniestra que tiene mucho que decir en esta historia, Marla Singer (Bonham Carter).
Bueno, hasta aquí creo que no he cometido ningún spoiler
ahora taparos los ojos que viene lo mejor.
Para empezar, las reglas que todo luchador debe de conocer:
- La primera regla del Club de la lucha es: Nadie habla sobre el Club de la lucha.
- La Segunda regla del Club de la lucha es: NADIE habla sobre el Club de la lucha.
- La tercera regla es: La pelea termina cuando uno de los contendientes grita "alto", pierde la vertical o hace una señal.
- La cuarta: Solo dos personas por pelea.
- La quinta: Solo una pelea a la vez.
- Sexta: Sin camisa y sin zapatos.
- Septima: Cada pelea dura lo que tiene que durar.
- Octava: Si esta es tu primera noche en El Club de la lucha... entonces TIENES que pelear.
También quería dejar constancia de algunas citas de la
película que dicen grandes verdades como por ejemplo el discurso que se marca
Tyler Durden (Brad Pitt):
“La publicidad
nos hace desear coches y ropas, tenemos empleos que odiamos para comprar mierda
que no necesitamos. Somos los hijos malditos de la historia, desarraigados y
sin objetivos. No hemos sufrido una gran guerra, ni una depresión. Nuestra
guerra es la guerra espiritual, nuestra gran depresión es nuestra vida.
Crecimos con la televisión que nos hizo creer que algún día seriamos
millonarios, dioses del cine o estrellas del rock, pero no lo seremos y poco a
poco nos hemos dado cuenta y estamos, muy, muy cabreados.”
Creo que esta última cita define muy bien lo que es esta
película, un realismo sucio plagado de filosofía que también tratan otro autores
como Charles Bukowski o Raymond Carver. Marcan un estilo directo,
sin florituras, y unos personajes que andan siempre explorando los límites del ser humano.
En definitiva, una película con mucho fundamento y rica rica.
Jorge Ayllón García
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